19 etapas que demuestran que los exámenes finales no son buenos

Hello! He estado ausente unos días a causa de los exámenes finales. Si... exámenes, como los odios. En breves acabo por fin y seré... Libreee, como el sol cuando amanece, yo seré libreee, como el mar.  Pero por ahora, sigo presa de ellos.

Los exámenes finales no son buenos, no pueden serlo. Y como prueba de ellos os traigo 19 etapas por las cuales pasamos cuando tenemos que hacer un examen final, demostrando así,  que los exámenes finales no son buenos para la salud.

19 etapas que demuestran que los exámenes finales no son buenos

1. Llegada (Demasiado temprano) al lugar del examen.

2. Repaso compulsivo y totalmente infructuoso de los apuntes.

3. Fase de nerviosismo pre-examen.

4. Entrada atemorizada al aula donde va a realizarse el examen y carrera de obstáculos para pillar la última fila.

5. Reparto de los exámenes y siempre está el típico que suelta la trola de ¡¿Cinco hojas por ambos lados?! ó pone cara de ¡buuf Que difícil!. Y tú ya comienzas a sudar.

6. Por fin tienes el examen, pero tienes que esperar a que todos lo tengan para darle la vuelta. Mueres lentamente.

7. Carcajada histérica al darle la vuelta el examen. 

8. Comienzan los resoplidos y las manos en la cabeza automáticamente. 

9. Descubrimiento de que con lo (poco) que recuerdas no se puede contestar ni la mitad de las preguntas.

10. Intentos en vano de copiar (con el subsiguiente descubrimiento de que el de al lado tiene menos idea que tú).

11. Fase de derrumbamiento, desesperación, impotencia y espera (ya que es feo entregar el examen tras sólo diez minutos) y además no quieres ser el primero en entregarlo.

12. Entrega del examen y huida del lugar del atroz crimen.

13. Fase de nerviosismo pos-examen.

14. Fase de exclamación de palabras soeces (insultos): ¡joder tio se ha pasado con el puto examen! , “me han follado” y demás.

15. Comparación de resultados, comprobando que no hay dos personas con las mismas respuestas, o mucho peor: todos coinciden menos tú (típico).

16. Fase de consulta compulsiva de los apuntes (cuyo único resultado es empeorar el estado de ánimo del consultante).

17. Fase de declaración de principios: “Ya no voy más a… física, matemática, química”, etc. ¡Si lo llego a saber ni estudio!

18. Fase de negación: ¿examen?, ¿qué examen? Yo no he hecho ningún examen. ¡Me voy con mi unicornio! Lalalala

19. Fase depresiva postraumática y elaboración de planes para eliminarla:
- “Necesito pegarle a alguien”
- “Necesito emborracharme”
- “Necesito tomar café”

Después de esto las autoridades sanitarias pertinentes advierten que los exámenes finales perjudican seriamente la salud mental.

Nos vemos en breve bonitos, y a los que también están de exámenes... ¡MUCHA SUERTE!

XOXO